Una historia de la música
De los orígenes a nuestros días
Tras regresar al periodismo, la última gran obra de Rebatet es el monumental ensayo Une histoire de la musique (1969), personalísima y brillante muestra de su erudición musical, dominada por una escritura de gran belleza y agudo sentido crítico: este trabajo, en sus más de ochocientas páginas, supone uno de los mejores textos críticos sobre la materia producidos durante el siglo XX, y aunque denostado por ciertos especialistas -dada su acusada subjetividad, explicitada en el propio título-, confirma a su artífice como uno de los mejores prosistas de sesgo conservador en lengua francesa, cuya pluma ha trascendido la hueca adjetivación propia del artesanado de la escritura tan criticado por Roland Barthes.
Actualmente, Una historia de la música, de Lucien Rebatet, adquiere una dimensión nueva, renovada de puro infrecuente: la de una historia de la música que, cuatro décadas después de su escritura, mantiene intacto todo su poder de captación, y no tanto en virtud de sus contenidos, como de la fabulosa visión de conjunto de su artífice, un Rebatet cuya pluma, en plena forma, logra sortear las estrecheces del género, para adentrarse con sutil pericia en los dominios de la mera obra de arte. (Josbiarbi)
Obra admirable que nos seduce por su rigor científico, así como su vivacidad, su claridad, una uniformidad remarcable y la autoridad del juicio. Va dirigida a todos aquellos que ven en la música algo más que un fondo sonoro y a los amantes de la lectura, ya que su autor es un escrito r singular. Este extenso recital no es un catálogo ni una galería de retratos. Del principio al fin es un libro en movimiento. En él se puede seguir el paso constante de la música, rehacer sus conquistas, desde las flautas auriñacienses, 60.000 años antes de Cristo, hasta Boulez y Xenakis.
Actualmente, Una historia de la música, de Lucien Rebatet, adquiere una dimensión nueva, renovada de puro infrecuente: la de una historia de la música que, cuatro décadas después de su escritura, mantiene intacto todo su poder de captación, y no tanto en virtud de sus contenidos, como de la fabulosa visión de conjunto de su artífice, un Rebatet cuya pluma, en plena forma, logra sortear las estrecheces del género, para adentrarse con sutil pericia en los dominios de la mera obra de arte. (Josbiarbi)
Obra admirable que nos seduce por su rigor científico, así como su vivacidad, su claridad, una uniformidad remarcable y la autoridad del juicio. Va dirigida a todos aquellos que ven en la música algo más que un fondo sonoro y a los amantes de la lectura, ya que su autor es un escrito r singular. Este extenso recital no es un catálogo ni una galería de retratos. Del principio al fin es un libro en movimiento. En él se puede seguir el paso constante de la música, rehacer sus conquistas, desde las flautas auriñacienses, 60.000 años antes de Cristo, hasta Boulez y Xenakis.
Traducción de Marta Pérez