Un libro, Lost in Translation, saca a la luz las palabras del mundo imposibles de traducir

 

"EH?" LA ÚNICA PALABRA QUE ENTIENDEN EN TODO EL MUNDO

  • El hecho destaca frente a todos esos términos que nadie es capaz de traducir que ilustra Ella Frances Sanders en su libro Lost in Translation

  • La diseñadora británica Ella Frances Sanders no ha podido resistirse a la tentación de publicar un libro sobre las palabras y términos que son realmente intraducibles. No estará igual de cansada que los españoles al ver cómo se traducen de cualquier modo los títulos de las películas, pero sí que ha tenido que pensar en ellas, no en vano ha titulado su obra "Lost in Translation".
    Para ella, las palabras "intraducibles" son una maravillosa oportunidad: si nuestra lengua materna tiene "agujeros" para expresar ciertas cosas, "puedes mirar hacia otras lenguas para definir lo que estás sintiendo", desvela a la BBC.
    En su opinión, aprender sobre la existencia de estas palabras "nos recuerda nuestra humanidad, que todos estamos hechos del mismo material, que no necesitamos saber otros idiomas para ser capaces de comunicarnos".
    Lost in translation, publicado por la Ten Speed Press, presenta más de 50 ilustraciones de palabras extranjeras que no han encontrado una definición para llamar suya en los diccionarios de inglés. Hay substantivos y verbos de varias partes del mundo: País de Gales (con su sarcástico glas wen); Hawái (con su ‘akihi para describir los que suelen escuchar instrucciones de cómo llegar a una dirección y al empezar a caminar, se olvidan de ellas); Suecia (con su mangata, el reflejo de la luna dibujando una carretera en el agua); Brasil (con una tal de saudade, deseo vago y constante por algo que no existe y probablemente no puede existir); Japón (con sus komorebi, tsundoku, wabi-sabi) y un montón más. Estas son algunas de ellas:
    Mangata
    Es la palabra sueca para "reflejo, similar a un camino, de la luna en el agua".
    Akihi
    "Akihi" es una palabra hawaiana que expresa una situación conocida por muchos: el despiste que se siente tras escuchar las instrucciones para llegar a un determinado lugar.
    Hiraeth
    Con frecuencia, hay poesía en las etiquetas de lo intangible: la palabra galesa "Hiraeth" tiene similitudes con la palabra portuguesa "saudade", que describe un sentimiento de melancolía supuestamente característico de los portugueses o brasileños, y que se resume en una melancolía por un lugar que nunca existió (aunque uno de nuestros lectores nos escribe en la página de Facebook en BBC Mundo: saudade "no es extrañar a un lugar que nunca ha existido. Es un sentimiento que va más allá de sus sinónimos 'nostalgia', 'echar de menos', 'extrañar' o 'sentir falta'. es algo casi físico, es inexplicable").
    Iktsuarpok
    La palabra inuit "Iktsuarpok" se sitúa "en algún lugar entre la impaciencia y la anticipación". Significa el "sentimiento que te lleva a salir y entrar, salir y volver a entrar, para comprobar si hay alguien caminando por la colina o en la siguiente esquina".
    Como dice Sanders, "estas palabras dan a menudo un nombre a sentimientos o acciones que ya conocemos y reconocemos. Entonces, alguien de Brasil no es tan distinto a alguien de Suecia".
    Kummerspeck
    La expresión alemana "Kummerspeck", que significa literalmente "tocino de la pena", se refiere al peso que se gana cuando se come demasiado por razones emocionales.
    "Por desgracia, estamos programados para reconfortarnos con la comida", dice Sanders. "Hasta que te ves en una superficie reflectante un mes después, suele funcionar".
    Wabi-sabi
    La expresión japonesa "Wabi-sabi" significa "encontrar belleza en las imperfecciones, una aceptación del ciclo de la vida y de la muerte". Según Sanders, se deriva del budismo, que enseña que conocer "nuestra transitoriedad y la asimetría en nuestras vidas nos puede llevar a una existencia más gratificante, aunque sea más modesta".
    Pisanzapra
    Muchas palabras expresan una forma de medida específica de un lugar concreto. La palabra finlandesa "Poronkusema" describe "la distancia que puede recorrer un reno con comodidad antes de tener que descansar", mientras que "Pisanzapra" es un término malayo que se refiere al "tiempo necesario para comer una banana".
    Kalpa
    Kalpa es una palabra en sánscrito que significa "el paso del tiempo en una escala grande, cosmológica". Sander dice que "una vez que tienes una palabra para algo, se vuelve mucho más tangible, mucho más accesible. Las formas de tus pensamientos empiezan a incluir estas formas distintas de ver, de ser".
    Tsundoku
    La expresión japonesa "Tsundoku", que significa "dejar un libro sin leer después de haberlo comprado, normalmente en un montón junto con otros libros no leídos", ha ofrecido cierto consuelo a los que tienden a acumular libros.
    Boketto
    "Es agradable ver que los japoneses respetan tanto no pensar en nada que hasta le han dado un nombre a la acción", dice Sanders. "Boketto", que significa "mirar en la distancia, al vacío, sin pensar en nada específico", es su palabra favorita, dice. "Yo suelo hacerlo demasiado a menudo".

    "eh?", la palabra universal

    Un artículo publicado en PLOS One se ha encargado de analizar cómo se construyen algunos términos y construcciones y la forma de usarlas en el mundo. ¿Existe alguna palabra que pueda ser considerada universal? A rañiz de este estudio lo cierto es que sí. El término Eh? Huh?, en otras lenguas, es utilizada de forma muy similar en 31 países.

    ¿Es eh? una palabra como tal? Esa es la gran pregunta a la que los expertos dan un valor: ¿Me puede repetir? Aunque se pronuncie de forma gutural e incluso con cabreo. ¿No es eso lo que se quiere decir con su uso? Aunque no sea fonéticamente igual en todos los idiomas los expertos consideran que la función de esta interjección sí es universal. De hecho eh? es tan común como para ser prácticamente universal porque se considera un gruñido innato, un grito instintivo. Y eso es algo común en todos los seres humanos. Lo que no vislumbran los expertos es cómo se ha podido mantener este gruñido a lo largo del tiempo, teniendo en cuenta que los primates no tenían la comunicación cooperativa humana actual.

    Mientras que las vocalizaciones no lingüísticas, como estornudos, gritos y sonrisas están presentes al nacer o se desarrollan poco después, el uso de ¿eh? sigue una trayectoria que es muy similar a la de otros elementos lingüísticos. En los niños que  hablan Inglés americano, se emplea aunque sea de una forma un tanto errática a los 2,5 años, pero 7ya de forma perfecta a los 5 años. También hay quien postula entre los expertos que Eh? es producto del ambiente, una manera de adaptarse al entorno interactivo.

    La ley del mínimo esfuerzo impera. ¿Por qué “eh” y no otro ruido para interrumpir a nuestro hablante cuando no entendemos algo? Porque es tan breve y cortante que no hace falta interruptir a nadie para decirle que repita lo que acaba de decir y es una forma clara de llamarle la atención  de que no nos estamos enterando de lo que están diciendo. La morfología de “eh” es siempre muy similar. Los lingüistas la someten a examen y llegan a la conclusión de que suele estar formada por una única sílaba, generalmente con una vocal corta precedida por un sonido consonante glotal y termina con el sonido ascendente que suele identificarse con las proposiciones interrogativas. Otras palabras populares en este sentido son oh, ah o ajá. Pero la que reconoce todo el mundo es eh?